ÁNGELA PARDAL

Angela Pardal, nacida en Galicia y afincada en Barcelona, es una artista musical tremendamente inquieta que nos ha acostumbrado a la sorpresa, a la emoción y a la búsqueda constante de nuevos sonidos que le permitan expresar sus emociones. Sus inicios en la música fueron en el hip-hop. Desde muy joven la poesía fue algo que habitaba en ella. En la adolescencia sus versos eran un refugio, un lugar al que se escapaba y en el que se escondía. No fue hasta muchos años más tarde, después de una larga etapa como baterista de varias bandas indie, cuando consigue hacer de la poesía un lugar desde el que empoderarse, desde el que mostrarse tal y como es, y en el que dibujar su mundo interior de fantasía. Su proyecto en solitario como Angela Pardal se materializa en 2021 con su álbum ‘Alas’ (Raso). El nacimiento de este disco coincide con la transición de género de Ángela, y así sus canciones se entienden como un manifiesto, un ‘ahora sí’, un grito alegre de autodeterminación y libertad. Baile, electrónica, poesía y experimentación, en un trabajo que no dejó indiferente a crítica y público. Sound Isidro, Festival Máquina, Corufest, entre otros escenarios de toda la península, fueron testigos de las cotas de emotividad que alcanzaban las canciones de ‘Alas’ en directo. En 2023, nos sorprende con ‘Flores, techno y poesía’. Un trabajo oscuro, conceptual, taciturno, donde Ángela se acerca al spoken word con base electrónica, más cercano a artistas como Kae Tempest. ‘Sabía que sería un disco comprometido, que no iba a gustar a todo el mundo, pero tenía muchas cosas dentro que necesitaba contar y ésta fue la mejor forma de hacerlo’. En la canción que abre el disco, ‘Voy’, la artista deja clara esta necesidad repitiendo como un mantra ‘este disco me lo debo’. La poesía alcanza en ‘Flores’ su máximo esplendor, donde encontramos una Ángela melancólica pero esperanzadora, triste y bella, valiente y vulnerable. En 2024 publica el ep ‘Canciones entre la espada y la pared’. Cuatro canciones donde se puede intuir un giro natural hacia el pop. Cuatro cortes melódicos, luminosos, pegadizos, y tremendamente íntimos donde Ángela va encontrando su voz, relajada, personal, cantando al amor y dejando atrás su época oscura. Tras esta etapa de reencuentro, en 2025 se encierra en el estudio para componer su próximo disco, ’Campo caída’. Decidida a transitar por renovados océanos musicales, Ángela nos presenta un viaje hacia la heterodoxia pop, canciones contextualizadas por una fauna referencial que va de los Animal Collective de “Merriweather Post-Pavillion” a la magia de Dan Deacon o los hechizos krautpop de Stereolab. Un puente entre lo queer y el surrealismo, un cuento lleno de capítulos oníricos y encuentros mágicos con las criaturas más salvajes de su propia mitología. Diez canciones que suenan a festival de verano, donde sintetizadores, guitarras eléctricas, coros celestiales, y melodías épicas te golpean en el pecho y te hacen partícipe de sus historias más mágicas. Nunca antes se había sentido tan plena ni con esta efervescencia creativa a la hora de descifrar el enigma de todo lo que ocurre en su imaginación, de comprender su mundo y el mundo que la rodea para transformar esa energía en canciones. Todo se ilumina como un arco iris y la única forma de canalizar ese torrente de sensaciones es a través de este ejercicio de pop impresionista repleto de emociones. O lo que ella entiende como su forma de mutar hacia la sencillez desde la complejidad, de sonar a ella, totalmente autónoma.